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Divorcio: La decisión de separase en las familias con hijos

  separarse familia con hijos           Cuando los cónyuges de una familia con hijos deciden separarse una de las preguntas que se les pasa por la cabeza es ¿Qué consecuencias tendrá el divorcio en los hijos? Sin duda es una preocupación lógica y común, dado que los cambios afectan a los hijos (y también a los mayores) de muy diversas formas, y más si trata de algo tan serio como es una separación/divorcio, en el que es muy posible haya cambios de domicilio, nuevos hábitos y nuevas rutinas, desmoronamiento del sistema de seguridad… Existen multitud de estudios sobre este tema, haciendo referencia a multitud de variables, y como éstas influyen en una adaptación más o menos adecuada de los hijos, sin saber exactamente las claves de dicho proceso, dado que tiene un gran componente emocional. Y dicho componente está muy alimentado por la reacción de los progenitores ante el divorcio/separación (ver en este blog, “Divorcio ¿Bueno o Malo?”), de aquí la importancia de seguir los siguientes pasos:
  • Ambos progenitores tienen la decisión tomada: la separación “ideal” es la decidida por ambas partes, sin embargo, es la menos común de las separaciones, ya que una de las partes suele pensar que no es la mejor opción (por lo niños, por ellos, por las familias, por…). Que la decisión sea de ambos facilita mucho el proceso, desde el establecimiento de acuerdos hasta la consecución de los mismos, pasando por una etapa de tránsito muy liviana.
  • Establecer la forma de decírselo a los hijos: aquí se incluye el cómo, el cuándo, el dónde, el quiénes, el contenido… teniendo en cuenta la edad de los hijos, pues no será lo mismo explicárselo a niños de 5 añitos que a niños de 12 años.
  • Transmitir vs. Decir: y es que una cosa es lo que decimos y otra lo que estamos pensando; y los niños tienen la gran habilidad de percibir claramente lo que sentimos. Por eso no podemos comunicar un mensaje de tranquilidad, si estamos temblando, la voces se nos entrecorta, tenemos los ojos llorosos… puesto que lo niños se quedarán con esto, y no con el concepto de seguridad y normalidad que les intentemos decir ante el difícil hecho de separarse.
  • Evitar exponer a los niños a decisiones u opiniones: una de las consecuencias más negativas del divorcio en los hijos proviene de esto hecho, ya que al preguntarles para que tomen decisiones (con quién quieres estar, por ejemplo) se les hace elegir, es como preguntarles a quién quieres más a mamá o a papá, y su respuesta tendrá consecuencias reales, que posteriormente se convertirán en sentimientos de culpa.
  • Cumplir lo que se les comunica: es muy importante que se lleve a cabo lo de que se les diga a los niños, desde donde van a vivir, con quién, durante cuanto tiempo… ya que esto aportará cierta seguridad al estado de inseguridad creado; pues dentro del huracán observarán que hay cierto orden. Pero si no se sabe, o no se ha cedido, o no se ha llegado a un acuerdo, es preferible omitir esas informaciones, buscando el beneficio de los menores, y no marearlos.
  • La clave: pensar en los hijos y no en nosotros mismos. Es lo mejor para los niños.

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